“Este libro es mucho más que una novela de misterio y suspenso. Aunque no son las tres razones a las que hace referencia el título, lo recomendamos por tres importantes razones: Israel no solo es el autor de esta, su primera novela que ha escrito con 12 años, sino que también es el protagonista y, por si esto fuera poco, es uno de nuestros queridos pitagóricos ya desde antes de que formáramos Pitágoras, cuando todavía éramos Eureka.”